martes, 12 de julio de 2016

DE QUE TE AFERRAS

DE QUE TE AFERRAS

Fil 2:5 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús,

2:6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse,

2:7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres;

2:8 y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.

2:9 Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre,

2:10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra;

2:11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.

Dios es el creador del mundo y su plenitud, y siendo Dios se anonado , se humillo ,haciéndose hombre naciendo de una mujer escondiendo todo su poderío en un cuerpo de barro pero no le importo en lo más mínimo , se olvidó que era el supremo Dios y se anonado se humillo en ese cuerpo para salvarnos dejo su gloria su majestad, y presentarse en este mundo como uno de nosotros .tomo su gloria y su poderío  y se hizo como uno de nosotros no presumió jamás que él era Dios su humildad le permitió alcanzarnos y realizar su obra, que maravilloso es nuestro Dios y no termino su obra en la cruz del calvario  muriendo por nuestros pecados. no!!!!! nos dejo su evangelio para que podamos conducirnos y tener morada eterna en los cielos, se fue pero no nos dejó solo,  no señor, subió a los cielos y nos mandó el consolador que son la arras de nuestra herencia. Ahora quienes somos nosotros que con cualquier don u honor en la iglesia nos engrandecemos hasta tal punto de hacerle desaire a  los hermanos de la iglesia al pueblo de Dios. Nosotros debemos ser más humilde, entre más elevado sea nuestro cargo más humilde debes ser. No tenemos que llegar a la estatura de el? Entonces aprendamos de él, que es manso y humilde de corazón aleluya.
Sal 37:3 Confía en Jehová, y haz el bien; Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad.
37:4 Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón.
37:5 Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará.

Los humildes encomendamos nuestros caminos al Señor  y hemos descubierto que Dios es digno de confianza, por eso  nuestros problemas, salud, temores, frustraciones, las dejamos en las manos del Señor, creyendo que Dios nos guía y nos protege.

Los humildes confiamos callados en el Señor y esperamos en Él con paciencia.
 Encomendamos nuestro camino a Él,
 Esperamos callados con paciencia las obras de Dios en nuestras  vidas.

La humildad: Es confiar en Dios, encomendar  nuestro  camino a Dios, esperar con paciencia en Dios y evita la ira, evita la venganza, La humildad no deja paso a la ira. La humildad es el poder de absorber las adversidades y las críticas sin irritarse.
Seamos humildes en la tierra para poder heredar la vida eterna.

Nm12:1 María y Aarón hablaron contra Moisés a causa de la mujer cusita que había tomado; porque él había tomado mujer cusita.

12:2 Y dijeron: ¿Solamente por Moisés ha hablado Jehová? ¿No ha hablado también por nosotros? Y lo oyó Jehová.

12:3 Y aquel varón Moisés era muy manso, más que todos los hombres que había sobre la tierra.

12:4 Luego dijo Jehová a Moisés, a Aarón y a María: Salid vosotros tres al tabernáculo de reunión. Y salieron ellos tres.